Santo Domingo.– Adriana, la hija menor del presidente de la República, Luis Abinader, quien se graduó de la universidad la pasada semana en Estado Unidos, razón por la que el mandatario viajó a territorio estadounidense, es tendencia luego de que su hermana diera a conocer el noble gesto que esta ha querido tener con los niños de Gaza.
Graciela Abinader reveló a través de su cuenta de X, antigua red social llamada Twitter, que su pariente pidió a su madre que en vez de comprarle un regalo o entregarle dinero en efectivo, destine estos recurso para los infantes que residen en la Franja de Gaza.
«Durante la cena de graduación de mi hermana Adriana el sábado por la noche, mi mamá relató una conversación que tuvo con ella la semana pasada. Contaba que cuando le preguntó a Adriana qué quería de regalo de graduación, en lugar de solicitar dinero en efectivo o cualquier otro obsequio, pidió que en vez de que le dieran un regalo, se lo entregaran a los niños en Gaza y le enviaran el recibo», escribió en la red social.
Asimismo, detalló que no busca con estas declaraciones fijar una posición sobre la guerra que lleva esta nación con Israel, si no destacar los valores con lo que fueron criada por su padre y su madre, la primera dama Raquel Arbaje.
Lo que escribió Gabriela
Durante la cena de graduación de mi hermana Adriana el sábado por la noche, mi mamá relató una conversación que tuvo con ella la semana pasada. Contaba que cuando le preguntó a Adriana qué quería de regalo de graduación, en lugar de solicitar dinero en efectivo o cualquier otro obsequio, pidió que en vez de que le dieran un regalo, se lo entregaran a los niños en Gaza y le enviaran el recibo.
No menciono esto para imponer una opinión sobre el conflicto en el Medio Oriente. Lo cuento por dos razones. Primero, porque a pesar de la fiesta de la democracia que celebramos los dominicanos este domingo, no quería dejar pasar la oportunidad para felicitar a mi hermana menor, Adriana, quien se graduó de dos carreras en cuatro años.
Segundo, porque también quería aprovechar la oportunidad para felicitar a mis padres, no solo por la victoria del domingo, sino por sus enseñanzas. Gracias por enseñarnos a pensar críticamente, ser buenas personas, pero sobre todo, por inculcarnos que el éxito no radica en los lujos que alcanzas, sino en el bien que haces con los lujos que te han tocado, incluyendo la obtención de tu licenciatura, Adriana. Gracias, hermana, por ser el vivo ejemplo de las enseñanzas de nuestros padres. Te amo y te admiro ¡Felicidades a la bebé la casa!.
